Este jueves 23 de marzo se ha celebrado en Barcelona el acto simbólico de firma del «Compromís Nacional per un Turisme Responsable», un nuevo plan de la Generalitat para reformular el modelo de turismo de Catalunya. Al acuerdo, que cuenta con el apoyo de las empresas del sector y de los principales sindicatos, se ha sumado Feministes de Catalunya, después de que el proceso de consulta con entidades del ámbito social recogiera las enmiendas de la asociación en relación a la precariedad laboral y la abolición de la prostitución.
El turismo es una actividad económica de primer orden, que representa en torno al 12% del PIB catalán y un 13,5% del empleo.
- Como cualquier actividad económica, va más allá de las empresas del sector, de los trabajadores y trabajadoras y de la clientela, y tiene un impacto en la sociedad en general, sobre todo en aquellos destinos en los que está concentrada la actividad.
- Como cualquier actividad humana, está atravesado por sistemas estructurales de desigualdad y, en particular, por la desigualdad entre mujeres y hombres.
Feministes de Catalunya cree que, por tanto, un modelo de turismo responsable debe contar con una perspectiva transversal de género, que analice el impacto diferencial sistemático en hombres y mujeres que tiene cualquier actividad económica y actúe sobre él.
Feministes de Catalunya aportó propuestas en dos grandes líneas:
- Catalunya es un destino principal de turismo de explotación sexual, que incentiva la operación de mafias globales que hacen negocio con el tráfico y explotación de las mujeres y normaliza la violencia sexual como parte del ocio masculino. La explotación sexual no sólo es de una violencia extrema hacia las mujeres que la padecen, sino que también afecta a la concepción de todas las mujeres en la sociedad como objetos de consumo, configurando una estructura productiva dependiente de redes criminales.
- El sector turístico se caracteriza por las malas condiciones laborales, especialmente en los empleos feminizados, como las camareras de piso. Esto es consecuencia de la práctica muy extendida de la subcontratación, que precariza a las trabajadoras y dificulta su sindicación. Es necesario reforzar la protección de las trabajadoras, tanto en situaciones de abuso laboral como en casos de acoso sexual.
Pese a que el acuerdo tan sólo recoge grandes objetivos generales de cara a un cambio de modelo del sector turístico, Feministes de Catalunya tiene propuestas de actuación concretas para alcanzarlos, e invita a la Generalitat a adoptar las siguientes medidas con carácter de urgencia:
En relación con la explotación sexual:
- Revisar y prohibir los acuerdos comerciales del sector con operadores turísticos que incluyan visitas a prostíbulos o escorts dentro de los packs contratados de vacaciones, e investigación policial de estas prácticas.
- Realizar campañas de concienciación en hoteles y congresos sobre la realidad violenta de la prostitución.
- Promover protocolos y dispositivos de seguridad en establecimientos de ocio nocturno para actuar frente a situaciones de incomodidad y agresión de las clientas, particularmente en casos de sumisión química.
- Promover la adopción de un sello de calidad tipo “Turismo libre de explotación sexual” o “Turismo libre de proxenetismo”. Compromiso de la administración pública de licitar sólo con empresas que cuenten con el sello.
- Promover ordenanzas municipales que penalicen la demanda de prostitución a través de sanciones administrativas y cobertura legal, acompañamiento psicosocial y solución habitacional a las víctimas de estas industrias criminales a través de las redes del SIAD como víctimas de violencia de género.
En relación con la precariedad la laboral:
- Desbloquear la negociación y actualizar el Convenio del Sector de Hostelería y Turismo de Catalunya, que contemple la internalización en plantilla y la mejora de los derechos laborales de las camareras de piso.
- Incluir la obligación de registrar los protocolos de acoso de las empresas en el Acord Interprofessional de Catalunya, y destinar recursos económicos y humanos de la administración para realizar un seguimiento y vaciado estadístico de los casos en que se activan.
- Promover un sello de calidad al que opten las empresas turísticas que cumplan el convenio de sector y se ajusten a unas condiciones laborales dignas. Compromiso de la administración pública de licitar sólo con empresas que cuenten con el sello.
- Dotar de recursos humanos y financieros a la Inspección de Trabajo para que se garantice la aplicación de los convenios y el cumplimiento de los derechos de las trabajadoras.
- Revisar el protocolo de actuación del Institut Català d’Avaluacions Mèdiques y de las mutuas laborales en la tramitación de bajas y altas por accidente laboral.
- Establecer servicios de autobuses lanzadera para facilitar el acceso a polígonos industriales y comerciales adaptados al horario de las trabajadoras, como indica el Pla de Mobilitat Sostenible de la Generalitat.