Ficha técnica:
Título original: Moolaadé
Año: 2004
Duración: 119 min.
País: Senegal
Dirección y guion: Ousmane Sembene
Música: Boncana Maïga
Fotografía: Dominique Gentil
Reparto: Maimouna Helene Diarra, Fatoumata Coulibaly, Salimata Traore, Dominique T. Zeida, Mah Compaore, Naky Sy Savane
Productora: Co-production Senegal-Francia-Burkina Faso-Camerún-Marruecos-Túnez; Ciné-Sud Promotion, Centre Cinématographique Marocain, Cinétéléfilms, Direction de la Cinematographie Nationale, Filmi Domireew, Les Films Terre Africaine
Esta premiada película es una historia de tensión y resistencia entre la tradición y el cambio, un tema universal que en este caso se encarna en los personajes protagonistas que habitan un pueblo rural de Burkina Faso. A casa de Colle, la segunda esposa de Ciré, llegan cuatro niñas que se han escapado del ritual de la ablación del clítoris esperando que ella las proteja, ya que tiempo atrás se negó a que su hija fuera “purificada”. Siguiendo las tradiciones, Colle invoca el Moolaadé, que le permite dar asilo a las niñas. Esa protección viene representada por el cordón que Colle manda poner en la entrada de su casa, tras el cual las niñas permanecerán seguras, y que simboliza la diferencia entre quienes están a favor de la ablación y quienes se oponen a ella. Hay hombres y mujeres a ambos lados del cordón.
Como espectadoras nos agarramos a ese objeto ritual esperando que no se caiga cuando las criaturas, las visitas o las cabras tienen que sortearlo, e igual que las niñas rebeldes, nos sentimos momentáneamente a salvo cuando la cámara nos sitúa detrás de él. Así empieza el conflicto, porque si bien la tradición estipula que a las niñas se les debe practicar la ablación, también dice que el Moolaadé no puede ser violado. Lo que ocurra dependerá de la maraña de relaciones de subordinación/insubordinación entre esposos y esposas, madres e hijas, padres e hijos, o hermano mayor y hermano menor en la pequeña aldea burkinesa.
Aunque con participación francesa, este drama social es de factura africana, está apegado a su contexto y lejos de la estilización hollywoodiense a la que tenemos acostumbrado el ojo. La película transmite realismo y consigue sumergirnos en esa maraña de relaciones de una sociedad bien distinta a la nuestra, pero con la que al fin y al cabo compartimos tanto la opresión de las mujeres como la determinación de acabar con ella.
Escrito por Marina Pibernat.